¿Has intentado bajar de peso eliminando una comida? ¿Por ejemplo la cena?.. Es muy común pensar que eliminando la cena, nos puede ayudar a bajar de peso, cuando según parece, la realidad es precisamente todo lo contrario. Conoce por qué.
Mantener una alimentación sana y baja en calorías, distribuida en cinco comidas al día, es fundamental para adelgazar con salud, especialmente si esta dieta diaria se combina con la práctica de ejercicio físico.
¿Es cierto que no cenar adelgaza?
Es la opción preferida por muchas personas cuando desean bajar de peso rápidamente. Sin embargo, es una creencia errónea, ya que si nos saltamos una comida de las cinco que deberíamos consumir cada día, nuestro metabolismo tiende a trabajar más lento, lo que se traduce en que le costará más quemar la grasa.
No cenar hace aumentar la producción de insulina en el cuerpo, de forma que esto se traduce en que nuestro organismo necesitará más alimento para saciar su apetito, lo que supone que tenderemos a comer más en el desayuno.
¿Cómo debe ser una cena ideal para adelgazar?
Teniendo en cuenta que no cenar no adelgaza, la clave está en disfrutar cada día de una cena ligera, equilibrada y rica alimentos con proteínas (como la carne o el pescado), combinándolos con legumbres, verduras y frutas.
Tomar una cena ligera no significa comer sólo una pieza de fruta o un yogur, puesto que con esta medida solo conseguiremos sentir hambre mientras estemos durmiendo, lo que a su vez no ayuda a que descansemos bien.
El problema es que temporalmente pareciera tener resultado. Dejas de cenar por una o dos semanas y empiezas a bajar de peso, la ropa te empieza a quedar mejor. Esto pasa porque al quitar una comida (y no importa si es la cena, el almuerzo o el desayuno), tu cuerpo está en modalidad de “ayuno”, esto es gastando de energía y sin entrada de nutrientes por dejar de comer.
Como el cuerpo necesita energía para funcionar, tiene que tomarla de alguna parte del cuerpo y tiene dos opciones para tomar la energía almacenada: una fuente es la grasa almacenada y la otra es la masa muscular.
La pérdida de masa muscular a mediano o largo plazo conlleva a largo plazo problemas como la disminución de resistencia física, flacidez en la piel, falta de tonicidad y en algunos casos extremos puede dar dolores en la extremidades.
El problema se agrava cuando vuelvas a comer como antes, ya que vas a recuperar el peso anterior, y lo peor es que va a ser en forma de grasa, ya que el cuerpo entiende que hay escasez de alimentos y para “sobrevivir” debe almacenar mas energía que no genere mucho gasto en reposo.
Como resultado final, el aumento de peso y talla es mas rápido. Esto es conocido como efecto rebote o efecto Yo-Yo y es un desorden metabólico muy frecuente.
En resumen, dejar de cenar crea mas problemas de lo que realmente pensamos. Te produce pérdida de masa muscular y aumento de grasa, por lo que es inevitable el efecto rebote, y con el pasar el tiempo será mas difícil volver a bajar de peso con la misma práctica.
Ten en cuenta que puedes Bajar de Peso en la Oficina, con algunos pequeños cambios en tu rutina e incorporar la actividad física en forma diaria.
Fuentes:
www.natursan.net
www.inteligencianutricional.com