La fibra puede dividirse en dos tipos:
Fibra soluble
Abunda en las legumbres, frutas y verduras. Se caracteriza porque puede formar disoluciones viscosas, espesas ( de ahí que se pueda utilizar como aditivo y espesante en platos cocinados, en salsas, etc)
Fibra insoluble
Se encuentra sobretodo en los cereales completos. Es capaz de retener agua y de "hincharse" aumentando de esta forma el volumen.