Es muy dificil sostener un correcto hábito alimentario en un ambiente inadecuado, donde la oferta de comidas no es saludable y donde no es posible cumplir con horarios.
Tené en cuenta estos tips de decoración de tu casa para favorecer el descenso de peso.
1. Sentate frente a una mesa.. y no frente a la computadora.
Comé tranquila, despacio y sentada a la mesa. Hacerlo parada o al paso hace que tengamos un subregistro de lo consumido. Para tu cerebro, si no te sentás, es como si la comida pasara de largo.
2. Mirá el Reloj.
Tu estómago necesita 20 minutos para darse cuenta de que está lleno. tampoco es bueno quedarte más de media hora en la mesa, ya que puede hacer que comas en exceso. Cuánto más tiempo te quedes, más riesgo tenés de romper la dieta. El tiempo ideal son 29 minutos.
3. Bajá las luces.
La luz brillante te incita a comer acelarada, ya que es un tipo de reflejo que estresa. Pero no las apagues del todo.
4. Escondé el control remoto.
Si tenés el hábito de comer mirando tele, vas a comer más. Cuando estás distraída por la televisión, dependés de pautas externas, como la tanda comercial o el final del programa, para determinar cuando parar de comer, en lugar de hacerlo cuando realmente te sentís llena.
5. Bajá el volumen
Mientras que la melodía suave crea una actitud pachorra que te relaja, los ritmos movidos y ruidosos hacen que mastiques más rápido y comas de más también.
6. Apagá el aire acondicionado
El calor es el mejor amigo de tu dieta. Cuando tenés frio, intentás calentar el cuerpo comiendo. Cuando estás con chuchos de frío tu cuerpo te pide más energía para mantener la temperatura central y esa potencia generalmente viene en forma de papas fritas.
7. Olvidate de la porción grande
Está comprobado que el solo hecho de ver comida te tienta a llevarla a tu boca. Un buen tip o consejo es aprender a cocinar lo justo, y recordar que se debe comer porciones tamaño "restaurant caro" si se está a dieta.
8. Minimizá tu menú
Ingerís hasta un 40 % más cuando te sirven una variedad de platos que cuando hay una sola opción.
9. Calentá la comida
Calentá tu comida ya que la temperatura de tus comidas puede hacer la diferencia. Los alimentos calientes producen más sensación de sacieda. Invertí un minuto para recalentar ese pedazo de pizza o para agregarle a tu ensalada fría un trozo de pollo tibio.
10. Elegí platos chicos
es una buena recomendación servir en platos de postre sobre todo las pastas y evitar las fuentes en la mesa, dado que la consigna es no repetir. Sólo se puede aceptar la fuente en la mesa cuando se cocina lo justo y necesario.
11. Disfrutá de tu propia compañia
Triste pero cierto: comés menos cuando lo hacés a solas. Según un estudio una persona consume 44% más cuando lo hace en compañia de, al menos, otra, y 76% más cuando está junto a siete o más personas. Cuando lo hacés en grupo, encargate de ser la última en empezar y vas a lograr disminuir calorías. Y andá armada de buenas anécdotas: cuando estás en el medio de un cuento, no da para que hables con la boca llena.